Cuando sabes el origen y el destino de un abanico, la implicación en el trabajo es máxima. El origen es ancestral, La noche de los mayos, los jóvenes se reúnen para cenar e ir a buscar al campo peonias (flores silvestres) u otras flores para colocarlas en los balcones de las mozas a las que pretenden. En la actualidad la flora silvestre está protegida, y podemos servirnos de este soporte para expresar lo que sentimos. El destino es una novia, que tendrá sus peonías para toda la vida Abanico en madera de danta lacada, país de algodón pintado a mano